¡Oferta!

Pollo
corralero
en pepitoria

Del capón, se le separa el muslo y el contra muslo, se salan, se enharinan con Maicena (así lo pueden comer los celiacos) se refríen en aceite de oliva, en el que previamente habremos dorado unos dientes de ajos y unas almendras. En ese aceite se rehoga una cebolla gorda, una vez dorada se agregan los capones junto con el jamón en tiras o tacos, a elegir, ponemos el azafrán, se añade el vino blanco, el perejil, se cubren de agua, se añaden los huevos cocidos, las almendras machacadas con los ajos dorados, se deja cocer a fuego lento un par de horas, se deja reposar un día.

18,00  15,00 

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Una vez atrapado el Capón es pescuezado in situ, evitando que el gallináceo en cuestión sufra lo más mínimo, osea, tapándole los ojos con una mano mientras con la otra se le retuerce el pescuezo, puro ecologista, que cosas. Desplumado y eviscerado, se le separa el muslo y el contra muslo, se salan, se enharinan con Maicena (así lo pueden comer los celiacos) se refríen en aceite de oliva, en el que previamente habremos dorado unos dientes de ajos y unas almendras. En ese aceite se rehoga una cebolla gorda, una vez dorada se agregan los capones junto con el jamón en tiras o tacos, a elegir, ponemos el azafrán, se añade el vino blanco, el perejil, se cubren de agua, se añaden los huevos cocidos, las almendras machacadas con los ajos dorados, se deja cocer a fuego lento un par de horas, se deja reposar un día (nunca en la ventana que se lo puede comer el gato) y a disfrutar.